El Caballero de Madara, Patrimonio de la Humanidad en Bulgaria

¿Patrimonios de la Humanidad en Bulgaria?. Pues sí, aunque a algunos les pueda parecer que los búlgaros no tienen un país muy turístico ( eso es porque no se han dejado caer por allá ), en este país tengo que reconocer que se halla uno de los Patrimonios de la Humanidad que más interés me ha despertado desde siempre.

Para disfrutarlo nos tendríamos que dirigir al nordeste de Bulgaria, a orillas del Mar Negro. Allí se encuentra el pequeño pueblo de Madara, un lugar que para cualquiera pasaría completamente desapercibido. Sin embargo, a pocos kilómetros de allí, en la meseta de Madara, cabalga sobre la roca el Caballero de Madara.

Nuestro caballero es un gran relieve tallado en la roca de un acantilado, completamente vertical, de unos cien metros de altura. La figura se encuentra situada a unos 23 metros del suelo, y representa a un caballero clavándole una lanza a un león que yace a los pies de su caballo, y a su perro siguiéndole.

Cuando te sitúas bajo el acantilado os puedo asegurar que parece increíble el tallado. Sin embargo, os recomiendo verlo algo más distanciado, para comprobar mejor los contornos del caballero. Dicen que se esculpió en la roca en el año 710, y desde 1979 es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Hay que decir que todo el entorno es un lugar tremendamente histórico. Hay restos de santuarios paganos, cuevas que eran antiguos templos tracios, y, en la cima de la meseta, a la que se sube a través de unos escalones entre las rocas, restos de la muralla de un gran palacio. Ya que estáis en la cima, disfrutad de las maravillosas vistas que se tienen.

Para hacer mejor el recorrido, bajo la meseta hay posibilidad de quedarse a dormir en una pequeña pensión. Allí disponen de bares, restaurantes, tiendas de souvenirs… Ya sabéis que, allí donde hay un monumento, allí que se ha montado el jolgorio turístico…

Lo que está claro es que el Caballero de Madara, del que dicen que es el símbolo de la Bulgaria medieval, llama poderosamente la atención a todo aquel que lo visita. Siempre te queda la pregunta de… ¿cómo demonios, en el siglo VIII, pudieron tallar algo semejante en un acantilado como ese?…

Foto Vía Bulgaria Travel